La Public Library de Newcastle: Encontrar las diferencias...

"¡Qué riqueza de lujo!"

                                                                             PÉREZ GALDÓS, Benito. Fortunata y Jacinta.

 

Newcastle es una ciudad de tamaño medio. De unos 300.000 habitantes, como Alicante. Allá me han llevado razones familiares y de turisteo vil. Ya sabéis que ahora, en mis periplos, incluyo visitas a bibliotecas, cosa que antes no hacía. La que os quiero presentar es la Public Library, de nueva factura, apenas tres años desde su inauguración, pero de tradición centenaria y que forma parte de una amplia red de bibliotecas públicas.

Ante tamaña entrada y con las seis plantas que se perciben desde el exterior, es lógico que se imponga un panel como el que sigue para orientar al usuario sobre las secciones, los espacios en las que se encuentran, etc. Por lo demás, la organización de los fondos se corresponde con la clasificación Dewey, de 1876 (y que luego dio origen a la más conocida y usada en España C.D.U.).

En realidad, y como veréis después de su descripción, se trata más bien de un centro de documentación, latu sensu, puesto que incluye secciones con material audiovisual, con cedés y deuvedés, al tiempo que sirve de archivo ciudadano, como la que se muestra a continuación con apartados para "nacimientos", "matrimonios" y "muertes".

A la más rabiosa modernidad de los ordenadores, que pueden ser usados durante dos horas por cada usuario sin restricciones, se unen los reproductores de microfilmes, y cualquier otro soporte que suponga dificultad para recuperar la información. Junto a ello mantienen el viejo catálogo de fichas clásicas.

Por supuesto poseen una zona dedicada a los infantes, espaciosa y cómoda, a la par que atractiva para criaturas y progenitores, con libros, audio y posibilidades de cuentacuentos en su pequeño escenario a la derecha. Véase si no.

Del mismo modo también existen espacios para el descanso de los usuarios, separados del resto de los de uso más frecuentes. Como no puede ser de otro modo, en tierras donde el sol brilla raramente, están bien iluminados y disfrutan de vistas casi aéreas.

Añaden a ello zonas expositivas en la sección de revistas ilustradas de fines del s. XIX, que aparecen encuadernadas y al tiempo abiertas para que se puedan ojear/hojear, lo que está en sintonía con la filosofía de la biblioteca del "sírvase usted mismo", ya que es de acceso directo.

Otro de los expositores muestra algunos de los diferentes elementos necesarios para la conservación y restauración de ejemplares, que es otra de las tareas de la biblioteca: diferentes tipos de papel y pieles para el encuadernado, así como los hilos necesarios para el cosido, pan de oro para las ilustraciones, etc.

Con todo lo expuesto, lo más llamativo es el abundantísimo número de expertos bibliotecarios que funcionan en el establecimiento. Dado por sentado que los usuarios van estando formados, ya que si no sería imposible la libre disposición, no cabe duda de que siempre cabe la posibilidad del despiste o la perplejidad ante la búsqueda de algo impreciso. Pues bien, desde la misma entrada se dispone de unos mostradores unipersonales atendidos por expertos en búsquedas (vid infra), que las realizan junto al usuario, lo que permite a éste orientarse mejor en las siguientes. Si no se consigue, llaman a un experto, que se encarga de continuar la pesquisa de una manera más precisa y especializada.

Lógicamente toda esta infraestructura supone un considerable dispendio, que la ciudad obtiene mediante el pago ciudadano de los correspoondientes impuestos municipales. Los servicios públicos y colectivos pueden ser caros, pero permiten que todos los habitantes de la ciudad tengan acceso a ellos. Si fueran privados, serían con toda seguridad más costosos y por ello restringidos a quien pudiera pagárselos. Y en eso están Cameron y sus muchachos, dispuestos a efectuar los recortes y las privatizaciones que Margarita Thacher no realizó en su momento. Si os cuadra un viajecito por la zona, no dejéis de visitarla.

José Manuel Mora.

P.S. Aquí dejo unas cuantas imágenes en movimiento que creo que completan lo dicho más arriba.