Archivos que hablan
Una vez más los archivos, esos lugares adecuados para los ratones de biblioteca (de archivos, digo), vuelven a hablar alto y claro. En este caso se trata de uno que, contrariamente a lo que en realidad es, no se llama "archivo", sino Acervo (los latinoamericanos, siempre tan amantes de los arcaísmos, tal vez porque los conservan con más cuidado que nosotros). Los adjetivos que le siguen, Histórico y Diplomático, lo caracterizan como uno especial por lo específico de su contenido. Contiene documentos de 1865 a 1988, que lógicamente tienen que ver con la actividad diplomática de los Estados Unidos de México, y cuenta con un
archivo fotográfico de aproximadamente 2.400 imágenes que abarcan ese periodo.
¿Por qué lo traigo, pues, aquí a colación? Porque alberga un tesoro de memoria que nos debería ser preciada a los españoles. A punto de terminarse nuestra guerra "incivil", empiezan a llegar cartas a la Embajada mexicana en París. Muchos sabían que, si se quedaban en España, ponían en peligro sus vidas. Latinoamérica, y en concreto México, con su presidente, Lázaro Cárdenas a la cabeza, se ofrecía como una posible salida del laberinto. Tras la derrota de la República, muchos de sus partidarios, que habían pasado la frontera en condiciones penosas, fueron confinados en campos de concentración que no llevaban ese nombre, muchos en las playas del sur de Francia, incapaz ésta primero de albergar tal contingente de huidos con lo puesto, y no deseosa de hacerlo, una vez que estalla la Guerra Mundial y el Régimen de Vichy se pone de parte de los invasores.
Entonces es cuando se multiplica el número de cartas/peticiones de ayuda. En ellas se ofrecen las capacidades del redactor para el país de acogida, o se describe la situación extrema en que se encuentra el demandante de ayuda, en un intento desesperado de escapar del infierno de Argelès y alrededores. Todo este material, hasta ahora sin estudiar y por lo tanto prácticamente inédito, está a disposición del investigador y su conocimiento permite acercarse a aquel drama humano que, sin la conservación de estas 7.000 cartas, sería ahora imposible. Gracias a ellas podemos comprender mejor alguna de las consecuencias de aquella tragedia auspiciada por los militares golpistas. Y, una vez conocidas, podremos practicar el ejercicio insoslayable de la memoria colectiva, ya que las cartas están ahí para señalarnos nuestra obligación de recordar.
Ya sé que no nos vamos a desplazar al D.F. pero con el enlace http://www.sre.gob.mx/acervo/ seguramente podemos tener acceso a un enorme caudal de información, para lo cual habrá sido necesaria la tarea previa del archivero mediante la custodia, ordenación, incremento y
restauro de los acervos documental y bibliográfico de la Secretaría;
hacer accesible la consulta de documentos; elaborar normas técnicas de
organización de los archivos y bibliotecas de las oficinas del Servicio
Exterior Mexicano y de las unidades administrativas de la Secretaría;
realizar investigaciones históricas, utilizando fundamentalmente el
acervo documental de la Secretaría; publicar las investigaciones en sus
diferentes series; organizar y mantener al día las bibliotecas de las
embajadas y consulados, de acuerdo con las normas técnicas establecidas,
y difundir las publicaciones y los resultados de investigaciones
diversas mediante eventos de carácter cultural. Son palabras sacadas de la página del Acervo, que muestran la importancia de la actividad del archivero.
Y ya que hablamos de cartas y fotos, y de México, no quiero dejar de citar aquí el asunto de "la maleta mexicana", de capital importancia para los aficionados a la fotografía y para los interesados en nuestra Guerra Civil vista a través de los ojos de tres judíos huidos de la barbarie nazi: R. Capa, G. Taro y David Seymour, alias"Chim". Una vez más se ve necesaria la tarea del documentalista a la hora de ordenar catalogar, , cuidar y poner a disposición del estudioso todo este tesoro de información.
Como la historia es muy larga y como se cuenta muy bien en el blog, (https://www.naranjasdehiroshima.com/2012/11/la-maleta-mexicana.html) dejo aquí el enlace para posibles interesados en ampliar conocimientos. Además el blog es estupendo para quienes sean forofos del documental. Combativo, informado, serio. Hay una peli al respecto que cuenta todos los avatares de la famosa maleta, filmada en 2011 por Trisha Ziff y que se puede visualizar desde ese blog. Absolutamente recomendable. De nada.
José Manuel Mora.
Comentarios